El modo constituye una de las manifestaciones de la modalidad. La categoría del modo se caracteriza por presentar una amplia gama de valores gramaticales. En su sentido estricto, los modos representan paradigmas flexivos, aun cuando sean a veces defectivos o incompletos, o puedan coincidir con elementos de otros paradigmas. Este criterio permite delimitar en español tres modos: imperativo, indicativo y subjuntivo. Es habitual dividir la información modal que expresa el verbo en dependiente e independiente. Se llama dependiente el modo que no puede aparecer si no es en presencia de un inductor gramatical; en caso contrario, el modo es independiente.